martes, 17 de julio de 2007

Hay arañas en tu habitación


Vigilando siempre mi zona permafrost, que no le afecte el cambio climático de los cojones y acabe saliendo a la superficie aquello que mantengo a salvo y oculto bajo la tundra. Que no es que me preocupe que ojos ajenos sean testigos de mi sección de congelados, es a los propios a quienes quiero evitar a toda costa esa visión. Porque una cosa es coger pedacitos de vez en cuando, cuando a mí me parezca conveniente, y meterlos en el microondas para ver cómo giran, pues las cosas que giran me atraen; contemplarlos un ratito, no demasiado, para luego tirarlos a la basura, que lo que se ha descongelado una vez ya no se puede aprovechar. Y otra cosa muy distinta es que te pongan el plato precocinado delante, y si no lo quieres para comer, pues te lo vas a encontrar a la hora de la cena. ¿Que no? Pues al día siguiente. Como mi madre con las lentejas cuando era pequeña.


27 comentarios:

Anónimo dijo...

A mí me encantan las lentejas, esas las comía sin problema. El problema surgía cuando mi madre tenía la feliz ocurrencia de poner espinacas gratinadas con bechamel. Duraban una comida, una cena y hasta un desayuno si hacía falta. Al final opté por comerlas en dos bocados y sin respirar. Ya que tenía que pasar por semejante tortura, que al menos no durase dos días.

Mrs. Sarmiento dijo...

Qué bien que te hayas quedado solo con la última frase, nena. Te lo digo de verdad, eh.
A mí mi madre, después de recibir una llamada del colegio en sexto de egebé preguntándole si la niña comía, optó por empezar a machacármelas. Y hasta no hace tantos años así he ido, no te creas. Ahora me encantan, fíjate. A mí con las espinacas me engañaban con Popeye. Siempre he sido tan crédula...

nadadora dijo...

Guau.
Y ahora mis conclusiones: a mí no me importa comer lo mismo tres días seguidos, me encantan las lentejas, como siempre me lo comía todo (y pedía repetir) nunca tuvieron que ponerme el mismo plato dos veces por delante, las espinacas también me gustan, la foto del pequeño elefante me da pena, y una última cosa, lo que se ha descongelado una vez sí que se puede aprovechar, lo que no se puede es volver a congelarlo.

Mrs. Sarmiento dijo...

Qué chica todo terreno, oye. Yo llegué a tener cuatro días seguidos el mismo plato delante, para comer y para cenar. Buah. La foto del pequeño mamut da pena, sí. Pero si piensas que lleva más de 10.000 años muerto da un poquito menos. Un poquito solamente. Y tienes razón respecto a lo de los descongelados, me expresé mal.

Anónimo dijo...

Dios, desde que se inventaron los no frost, los congeladores se han convertido en cajas de pandora. El mío tiene poco más de un año de vida y ya me da miedo meter la mano hasta el fondo. El consuelo es que cuando el cambio climático acabe con las acedías de Sanlúcar siempre se podrá recurrir a mí para extraer adn. Para el cazón no sé si habrá remedio, como lo adobo antes de congelarlo...
Y ya de los trasteros ni te hablo...

Mrs. Sarmiento dijo...

Ay ohne, ¿y a mí, que se me rompió ayer la nevera? Justo antes de las vacaciones, si es que no hay derecho, toma gasto extra. Que es que me quedé con la puerta en la mano, ¿tú te crees? Ains, qué desgraciadita soy.
Y... ¿qué es el cazón?
(Uy, no, trasteros no, por diossss, qué miedo).

nadadora dijo...

No sé, el pobre mamut, lo que me da pena es que parece que está ahí tirado de cualquier manera.
¿Y lo de la puerta no tiene arreglo con un poco de bricomanía?
A lo del cazón no contesto para no quitarle el trabajo a las personas, pero el mejor es el de mi pueblo.

Anónimo dijo...

Nena, hubiera sido mucho peor que te hubieras ido de vacaciones y te la hubieras encontrado estropeada. Te lo digo yo, que pasé hace poco por la experiencia y ni siquiera eran mías la casa ni la nevera, pero me tuve que chupar la jornada de limpieza.
Ays el cazón, tienes que probarlo: http://www.clubdelamar.org/cazon.htm
http://www.jerez2020.com/recetas/CazonAdobo.html
Nada, amos que... te hacía yo de otros sitio menos cercano. A este paso habremos sido compañeras de facultad y compartido profesora de literatura. Que pequeño es el interné.

nadadora dijo...

Lo que pasa es que lo que venden por ahí no es cazón.
Pues sí, yo no te hacía de otro sitio menos cercano, el colmo sería que fueras aquella que se parecía tanto a mí que la gente nos confundía y siempre me saludaba gente a la que no conocía.

Mrs. Sarmiento dijo...

nada, sí, da penita verle así. Pero es que solo habían dos fotos suyas en la red (Yuri se llama, y es mamuta), ésta y otra en que un grupo de científicos la estaban observando de muuuy cerca... que me ha dado más yuyu todavía.
Lo de la bricomanía lo veo complicado. Para mí imposible, vamos, pero es que si mi hermano, que arregló la mesa plegable hace nada, ya ha pronunciado las palabras "nevera nueva"... malo.
(¡Nacionalista!).

ohne, pues no sé yo. Total, cuando me vaya de vacaciones se va a quedar vacía. Y como el problema es puertil, mientras no hubiera habido habitantes tampoco habría pasado nada.
Lo del cazón suena bien, la verdad, probaré ese que dicen por ahí que es el mejor... Aunque reconozco que la palabra cartilaginoso me tira un poco p'atrás, pero bueno.
(¡No me jodas que sois vecinas! Ay madre, je).

Anónimo dijo...

Nada: qué me vas a contar de lo que venden por ahí. Yo me lo traigo de casa. Nota para temas pendientes: la desolación de una gaditana la primera vez que va a una pescadería de la meseta. ¿Nos han llamado nacionalistas por decir que nuestro cazón es el mejor? Si que está llegando lejos lo de la crispación.
No nos parecemos, al menos por lo que ví en tu foto. Yo era la bajita de ojos azules y gafitas que siempre se iba riendo. Entré en el 91... y como siga dando pistas acabo poniendo el DNI :-P
Sar: Sí, vaciarla antes de irse de vacaciones es muy sensato, pero no todo el mundo lo hace. Tú pruébalo y luego me cuentas. Y si no te gusta el que te den, te mando un taper por seur. (Más bien debimos ser medio vecinas en un tiempo)

Mrs. Sarmiento dijo...

Tenéis suerte de que no os haya llamado separatistas, que es un término que me gusta mucho más, si cabe. Juas.
Y no te creas que tiene mucho mérito vaciar mi nevera. Yo, como soy de género optimista, la suelo ver medio llena, pero vaya. (Anoto lo del tupper).

nadadora dijo...

A mí me puedes llamar separatista incluso, pero es que con el pescado no bromeo, ay, es que luego te quieren hacer comulgar con ruedas de molino. Y ahí lo dejo para no empezar una oda al pescado de estero.

ohne, jojojo, yo entré en el 90-91, así que coincidir, coincidimos.

Anónimo dijo...

¿Pero en la UCA en Filosofía y Letras? Joder pues entonces nos tenemos que conocer al menos de vista, jajajaja

Mrs. Sarmiento dijo...

Una oda al pescado de estero... qué bonito. Y qué tentador para quien no prueba carne.
(Permitidme esta licencia: jajajajajaja...).

nadadora dijo...

Sí, sí, en la mismísima UCA, y en la mismísima Filosofía y Letras, de los tiempos en los que los dos primeros años eran comunes. Jojo, menudo pañuelo.

Sar, para eso soy una poetisa.

Anónimo dijo...

Mira qué ocurrente está hoy la niña...
Madre mía, cuánta gente debemos conocer en común. ¿Por cierto, cuál era la profesora de literatura? Porque había dos que...

nadadora dijo...

A mí en primero me dio Ana Sofía.
Estoy haciendo repaso del profesorado y me cuesta recordar, pero saldrán.

Anónimo dijo...

Estoy... alucinando. Y le decía yo a Mrs.Sarmiento un día que a veces puedes vivir al lado y no llegar a conocerte.
Ana Sofía... inolvidable. Da para muchos posts, pero no es plan de petarle el blog a esta pobre muchacha.

nadadora dijo...

Para que veas. Yo no alucino tanto porque lo intuía.
Seguro que a Sar no le importa. Ahora ya me he emocionado y sería injusto no mencionar algunas cosas importantes sobre A. S. Una breve selección: los ojos azules tras las gafas de pasta, el pelo despeinado, la compulsión fumando Ducados, el café (cortado) que se llevaba a la clase, y la pasión con la que hablaba.
Ejem.

Anónimo dijo...

Aysssssssssssssss. Ejem. Cof. Uf. He sufrido una regresión y creo que hasta me he puesto colorada. Y la ironía. Y la mirada miope. Y la sonrisa condescendiente de "cuánto os queda por aprender". Y la pasmosa capacidad para leer andando por los pasillos sin tropezarse con nada. La única vez que se dirigió a mí fuera de clase casi se me caen las gafas. Pues hace poco la ví en el tren que me lleva de vez en cuando a casa. Estuve todo el viaje pensando en acercarme. Pero me perdió la timidez.

Anónimo dijo...

Ya hoy ni estudio, ni pongo lavadora, ni nada de nada.
¿Conocías esto? http://www.hwebra.com/hwebra_6/poesia/perez.htm

nadadora dijo...

Amén a todo lo que añades.
Oh, la viste en el tren. Yo tampoco me habría acercado, creo.
Sí que lo conocía.
¿Te puedes creer que guardo como oro en paño un artículo que le publicaron en el Diario de Cádiz sobre los culebrones?

Anónimo dijo...

Yo no tenía ni idea de que escribía (aparte de sobre otros). Y también lo voy a guardar como oro en paño. Son absolutamente ella. Alguno me ha dejado embobá.

Kinky dijo...

ejem... me parte el alma ver al elefantito asi. BU.

Anónimo dijo...

Es que la última frase es la mejor.
(Disculpen Nada y Ohne la interrupción de su viaje por el tiempo con mi comentario, su descubrimiento mutuo me ha emocionado, es la magia de internet).
Ay Sar, mira que no haber probado el cazón... El mejor lo comí aquí: http://www.playasdebolonia.com
/playa_playadebolonia.html

Mrs. Sarmiento dijo...

nada y ohne, ohne y nada, no comment, que es que esto es muy fuerte. Aparte de lo encantada que estoy de que utilicéis mi casa como cafetería, claro.

enciamet, sí, es bastante triste, pero me puede la vertiente científica. (¡Hoy nos vemos!).

lanueva, ¿has visto el patio? Je.
Y yo es que soy muy inculta en muchos campos, pero en el culinario creo que de los que más. Buah. De todas formas, espero solventarlo pronto.